viernes, 15 de julio de 2011

Sandwich de Nieve

No soy buena cocinera, cocino porque hay que comer y no quiero, además del gasto, que mi familia coma comida poco saludable.

Pero lo que si me gusta hacer son postres. No soy muy buena haciéndolos pero me agrada hacerlos y los hago de manera frecuente. Cheesecakes, nieves, bollitos, etc. Nieves es lo más fácil y práctico. Nieve de queso crema, de mango, de plátano, etc.

Recientemente hice sandwich de nieve. No soy muy fan de ellos para comprarlos pero decidí hacerlos y me gustaron. La nieve no fue lo que esperaba ya que fue con coco y creo que una nieve más cremosita como vainilla o de queso crema hubiera resultado con mejor sabor.



También me resultó difícil trabajar con la masa para las galletas, ya que no estaba tan firme y se pegaba mucho en la mesa de trabajo. Por lo que al utilizar el cortador de galletas no podía quitarlas para hornearlas. Tuve que ponerle bastante harina en la mesa de trabajo para poder trabajar con ella. Temí que fuera a quedar muy dura y seca pero el resultado final fue bueno.

Algún día volveré a intentarlo con otra nieve y probablemente con otra receta de galletas. Si quieren intentarlo, la receta la pueden conseguir en el blog de Tartelette. La imagen de sus sandwiches de nieve es por lejos mejor (obviamente), y está decorada muy linda. Vale la pena intentarlo.

Este es el Regalo...

Pues ya hace casi un mes que pasó el Día del Padre. Ese día para festejar, nos reunimos en la casa con familiares. Mi mamá compró comida ya que típicamente en las reuniones mi marido hace carne asada y pues la intención era celebrar a todos los papás por lo que lo mejor es que él también disfrutara y no estuviera la tarde en el asador.


Y tal cual había pronosticado, a mis hijos les encantaron el regalo que le hice a su papá. El regalo fue una almohada con las imágenes significativas de nuestro tiempo juntos. Fotos de nuestra boda y de nuestros hijos. Obviamente no reconocen su foto de bebé, pero si nos reconocen en nuestra boda y les encanta una foto donde salimos los cuatro. Hasta mi niña de 1 año la ve y le da de besos.





Mi marido aseguró que a él también le había gustado. Y creo que fue así, o tal vez como había llegado de viaje la noche anterior y nos había extrañado le resultó un buen regalo.



En realidad no me quedó bien la almohada. Las imágenes no las puse adecuadamente por lo que están un poco descoloridas. Pero creo que la intención es lo que cuenta y es un buen recuerdo.